Al entrar en la casa de Saúl, Anfey sintió algo diferente en la atmósfera. Generalmente podía ver a unos sirvientes en la entrada, pero hoy no había nadie allí. Anfey se detuvo, tratando de percibir la habitación. Su rostro se puso serio y severo.
Vacilando por un momento, Anfey levantó el pie y caminó hacia delante.
Pasando un arco, Anfey se encontró con dos hombres en trajes de Espadachín que vigilaban la entrada. También vieron a Anfey, y uno de ellos rió. "¡Hay uno más, chico, ven aquí!"
"¿Quién es usted, qué está haciendo aquí?" Anfey preguntó en voz alta.
"¡Tranquilo!" Un Espadachín dio una patada a Anfey con toda su fuerza, haciéndole bambolearse hacia adelante. Él dio unas palmaditas en la espalda de Anfey varias veces con ambas manos. Parecía que estaba comprobando si Anfey llevaba mercancías peligrosas. Empujó fuertemente los hombros de Anfey. "¡Entra!" Con sus fluctuaciones mágicas casi despreciables y su ridícula varita mágica, la gente podía decir lo 'poderoso' que era. Los dos Espadachines despreciaron al aprendiz de magia.
Anfey tropezó hacia uno de los Espadachines. Él ya sabía que estas personas tenían algunos planes malvados, pero... ¿cómo se atrevían a hacer mal en la casa de Saúl? A menos que no fueran forzados, nadie se atrevería a molestar a la familia de un Superior Archimago. Era difícil imaginar las consecuencias de enfadar a un Archimago.
Las esquinas de sus ojos se posaron sobre el pomo de la espada de uno de los Espadachines en la parte delantera, cuando un grupo de personas entró desde el patio trasero. Después de ver quiénes eran, Anfey disipó sus propias ideas.
Niya, con una cara vacía, caminó delante. Ella fue seguida por un Maestro mago grado medio con una túnica mágica de color verde claro y un Espadachín grado alto. Había siete u ocho guardias detrás de ellos. Todos estaban vestidos con las armaduras uniformadas de los guardias del Palacio de la Ciudad Sagrada.
Niya tenía suciedad en su ropa, y su cabello parecía desordenado. Todavía llevaba la vaina de espada en la cintura, pero la espada había desaparecido. Parecía que había pasado por una dura batalla.
Anfey no podía creer lo que acababa de ver. Había estado en la Ciudad Sagrada durante un tiempo y había oído hablar mucho de Niya de los estudiantes de la Academia Mágica. Niya era muy joven y aún sin madura, pero nadie podía negar el hecho de que era una persona importante. Había pocas personas que se atrevieran a desafiarla. Había una cosa más que confundió a Anfey. ¿Dónde estaba Ernest? ¿Lo atraparon también?
Niya miró a Anfey. Probablemente era vergonzoso que Niya fuera vista así. Se peinó el cabello con las manos, suspiró y siguió caminando.
"¿Qué estás mirando? ¡Ve!" Anfey fue golpeado fuertemente en su cintura con un pomo de espada.
Anfey gritó y se agachó con las manos en la parte baja de la espalda, gimiendo de dolor.
El Espadachín grado alto agitó la mano con impaciencia, y dos guardias salieron, agarraron los brazos de Anfey y se lo llevaron.
Anfey sintió oscuridad delante de él, y luego fue arrojado por el salón y entró en la sala de estar. Afortunadamente, había alfombra en el suelo, por lo que Anfey no se lastimó demasiado 'gravemente'. Sólo sus gemidos se hacían cada vez más fuertes.
"¿Qué estás haciendo?" gritó Christian. Anfey sintió que su cuello estaba sujeto por los brazos de alguien. La fuerza en su cuello no era mucho, sin embargo. "Anfey, ¿estás bien?"
"Duele..." Anfey se crispo la cara de dolor. Abrió los ojos y rápidamente miró a su alrededor. Todos los estudiantes de Saúl vinieron. Sus rostros estaban en blanco de rabia. Haciendo preguntas a Christian. Era extraño para Anfey ver a cada uno de ellos llevando brazaletes oscuros y brillantes en sus muñecas. Las pulseras parecían tan apretadas que estaban cavando en su carne. ¿Eran... esposas? ¿Para los magos?
"¡Bastardo, esto es ridículo, te las cobrare!" Blavi se estrujó, señalando el rostro del Espadachín y gritando: "¿Quién te dio la autoridad...?"
El Espadachín grado alto golpeó a Blavi, golpeando las palabras que aún no había terminado, y luego le dio una patada al estómago de Blavi. Blavi cayó con fuerza en el suelo, encogiéndose de dolor como un camarón cocido, con las manos sobre el estómago.
"¡Zeda, no los lastimes!" El Maestro mago grado medio, que estaba vigilando a Niya, gritó.
"¿Te olvidaste de la orden del Señor? ¿Quién va a ser responsable si algo les sucede cuando el Señor persiga esto?"
"Estaré bien, mientras la Perla de la Ciudad Sagrada, la señorita Niya, esté bien, estaremos bien". El Espadachín grado alto llamado Zeda se rió. "Estas basura... Haha, ¡quien se preocupa por ellos!"
Un Maestro mago grado medio era mucho más fuerte que un Espadachín grado alto en términos de poder, pero sus posiciones no eran meramente clasificadas por el poder. El poder de Saúl y Ernest era casi el mismo, pero uno era un Archimago en el palacio y el otro era un hábil Gran Maestro Espadachín vagando. Los niños de la Familia Real disfrutaban de la riqueza y el poder, lo que hacía difícil para ellos ser destacados en cuanto a su poder y habilidad, pero todos estaban en posiciones altas. Niya fue un ejemplo de eso.
Entre estos invitados inesperados, Zeda parecía ser el líder.
¡No! La frialdad destelló en los ojos de Anfey. Era obvio que sólo había un señor en la Ciudad Sagrada. Él era Wester. Después de que falleciera Yolanthe, sólo Wester podría tomar el mando de la Tropa de la Guardia del Palacio. No importaba si Wester trataba de convencer a Niya, usarla para chantajear a Saúl, o ambas cosas, no quería hacerlo con fuerza. Se salvó un poco de espacio si las cosas no funcionaban como querían. Tal como dijo el Maestro mago grado medio, sólo Wester tenía autoridad para dar órdenes sobre cómo tratar a los estudiantes de Saúl.
La sangre en la boca de Blavi parecía decirle a Anfey que esto no era 'desencadenar algo de su rabia', sino golpear a Blavi hasta la muerte. Normalmente, Zeda no debería haberse atrevido a ir contra las órdenes de Wester, pero lo que estaba haciendo era intentar intensificar el conflicto a propósito. ¡Algo estaba mal con él!
Un Espadachín caminó delante de Anfey. Con dos chasquidos, Anfey recibió el mismo tipo de pulsera en su muñeca.
"Incluso usaron un brazalete anti-magia en ti..." Christian sonrió amargamente.
Un hombre sonriente entró en la sala de estar, hizo una reverencia y les saludó: "Señor Zeda, he abierto la puerta del laboratorio y cerrado las matrices mágicas, puede enviar gente allí en cualquier momento.
Anfey levantó la vista, sonriendo sombríamente dentro. Ese hombre era su enemigo Marley! A juzgar por la mirada maliciosa que le dio a Anfey antes de que se fuera, Anfey ya sabía que Marley no dejaría que lo que hubo entre ellos ir. Sin embargo, no podía matar a Marley. ¿Quién podría esperar esto... Después de un período de sólo varios días, tuvieron la oportunidad de reunirse de nuevo, pero la situación había cambiado totalmente?. Esta vez Anfey estaba en la posición de desventaja.
"¡Buen trabajo!" Zeda sonrió.
"Gracias, señor" dijo Marley con una sonrisa de satisfacción.
Viendo la forma en que Blavi estaba siendo tratado, Christian y otros no se atrevieron a gritar y maldecir, a pesar de que odiaban Marley por lo que hizo. Miraron fijamente a Marley con odio para desencadenar parte de su ira.
Marley sonrió aún más brillante cuando vio a Anfey. La forma en que miró a Anfey parecía que había encontrado algunos tesoros. Caminó lentamente hacia Anfey. Anfey apartó a Christian, enderezándose la espalda y mirando fijamente a Marley.
Si Marley no se hubiera presentado, Anfey habría presionado cualquier deseo de esperar y ver lo que Zeda quería hacer. Pero ahora no podía soportarlo más, porque no estaba seguro de la cantidad de tortura que tendría que soportar de Marley.
"Anfey, Anfey, ¿has pensado alguna vez... estarías así un día?" Marley se acercó con una sonrisa furtiva, amable y palmeó el hombro de Anfey.
"Sí, lo hice". Anfey se burló de él.
"¿Huh?"
Anfey miró al techo y se golpeó la frente contra la cara de Marley. Todo el mundo trató a Anfey como un aprendiz de magia. Zeda y sus compañeros no creían que pudiera representar una amenaza para ellos. Christian y sus compañeros no creían que un aprendiz de magia pudiera cambiar la situación. Marley incluso pensaba en Anfey como un juguete, imaginándose todo tipo de maneras de torturarlo. ¡Este golpe feroz y venenoso convirtió el sueño de Marley en estrellas delante de sus ojos!
Anfey agarró la garganta de Marley con la mano izquierda a una velocidad fulminante. El grito de Marley se vio limitado por la tensión en su garganta. Anfey levantó a Marley por su garganta y lo usó como un escudo, corriendo hacia Zeda.
Zeda estaba en tal estado de shock que no tuvo tiempo de retroceder. Sacó la espada y apuñaló la espalda de Marley. La espada de Zeda fue empujada hacia el costado de Marley. Anfey arrojó el cadáver a Zeda, obligándolo a levantar la espada, lo que dejó un área expuesta a ataques. Zeda aulló y reunió su poder de combate, listo para tomar el ataque de Anfey. Anfey no tenía ni arma ni poder de combate. Zeda pensó que no había manera de que Anfey pudiera hacerle daño.
Incluso viendo cómo Anfey luchó, Zeda todavía subestimaba lo feroz que podría ser Anfey. Sólo él mismo tenía la culpa de ello. En el momento en que Zeda pasó tratando de reunir su poder de combate y sacar su espada, Anfey ya había pinchado los ojos de Zeda con dos dedos.
Los ataques de Anfey eran demasiado rápidos y la distancia entre ellos era demasiado corta. Zeda sólo tuvo tiempo de cerrar los parpados antes de sentir un dolor agudo en los ojos. El dedo índice y el dedo medio de Anfey ya estaban clavados en las órbitas de los ojos.
¡Como un asesino bien calificado, podría matar a una persona sin ninguna arma!
Zeda lanzó dolorosamente un grito penetrante, tropezando hacia atrás con las manos en los ojos. Anfey extendió el brazo a la espada de Zeda con la mano derecha. Sacó la espada del cuerpo de Marley y la sangre salpicó por todas partes.
Todo esto pasó demasiado rápido. ¡Cuando el cuerpo de Marley todavía estaba volando en el aire, Anfey ya había derrotado a Zeda! Anfey se deslizó hacia un lado. Ya estaba a dos metros de distancia, corriendo hacia el Maestro mago grado medio detrás de Niya. Anfey fue capaz de calcular con precisión y correctamente todo en esta batalla. No se apresuró a atacar al mago. En su lugar, se deslizó dos veces. Parecía tan innecesario, pero de hecho todo era parte de sus cálculos.
Desde el ángulo en el que había luchado, podía evitar los ataques mágicos, pero Christian, detrás de él, no podía. Con su posición cambiada, no sólo aseguró la seguridad de Christian y sus compañeros, sino que también utilizó a Niya para medio bloquear al Maestro mago grado medio. De su anterior conversación, Anfey sabía que no se atrevían a lastimar a Niya. Si el mago quería usar magia, tenía que caminar hacia los lados para comenzar la magia. Anfey estaba seguro de que el tiempo necesario para deslizar sería mucho menor que el tiempo necesario para eludir. ¡En lugar de perder, había ganado!
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